Sebastián Maluenda, estudiante de Periodismo de la Universidad Finis Terrae, se desempeña como bombero hace cuatro años: «Es una emoción que no te la entrega nada en el mundo».

Por Antonia Morán

Sebastián Maluenda es un alumno de tercer año de Periodismo de la Universidad Finis Terrae, pero él no es un estudiante común. Durante cuatro años de su vida se ha desempeñado como bombero voluntario en “Los Guindos”, la Tercera Compañía de Bomberos de Ñuñoa. En diálogo con PostData, «Seba» habló de su otra pasión.

-Sebastián, ¿cuándo comenzó a ser Bombero?

-Empecé en el 2021, a los 18 años, aunque antes de eso fui parte de la Brigada Juvenil, que es como ser scout en este mundo. Ahí forman a jóvenes entre los 12 y 17 años.

¿Qué trabajos importantes le ha tocado realizar?

-Me tocó ir a los incendios forestales que ocurrieron en el sur y a incendios en otras comunas. Estuve cuando se quemó en abril la Fábrica de Colchones, en la comuna de Paine. 

-¿Por qué eligió ser bombero?

-Me gusta mucho ser bombero, me gusta ayudar a la gente. Es una emoción que no te lo entrega nada en el mundo. En mi familia es tradición serlo, somos cuatro generaciones y todos hemos estado en la misma compañía. He podido salir con mi papá a llamar con mi papá, aunque él se preocupa de que me pase algo. 

-¿Tiene interés en relacionarlo con el periodismo? ¿Cómo?

Voy a ser bombero hasta que me echen o hasta que me muera, me veo por toda la vida. Quiero relacionarlo con mi carrera y con el periodismo policial.